Según fuentes familiarizadas con el asunto, el gigante del comercio minorista Amazon está considerando la posibilidad de comprar Peloton y está en conversaciones con asesores sobre si debe proceder y cómo hacerlo. Además, el Financial Times informó a finales de la semana pasada que Nike está evaluando una oferta por Peloton.
Todas las partes han declinado hacer comentarios sobre el asunto.
La noticia llega apenas días después de que Blackwells Capital instara al consejo de administración de la empresa a ponerla en venta y a destituir a su consejero delegado, John Foley, acusándole de realizar operaciones que establecían elevados costes fijos y de retener un mayor inventario mientras engañaba a los inversores sobre la necesidad de capital.
Durante los confinamientos por COVID-19, las ventas de Peloton se dispararon porque la gente compraba equipos para entrenar en casa. Pero cuando las restricciones empezaron a levantarse, la riqueza de la empresa comenzó a desvanecerse.
Peloton está pasando por un mal momento al intentar suavizar el golpe a su crecimiento recortando el precio de su famosa bicicleta y destinando más dinero a los anuncios. En enero, Peloton reveló que estaba revisando el tamaño de su plantilla y trabajando en los niveles de producción.
Estas medidas siguieron a un informe que afirmaba que la empresa estaba deteniendo temporalmente la producción de sus populares bicicletas de fitness y cintas de correr tras una importante caída de la demanda.
Ahora todas las miradas están puestas en los resultados del segundo trimestre de 2022 de Peloton, que se presentarán el 8 de febrero.
En el momento de escribir este artículo, el precio de las acciones de Peloton cotizaba un 23,25% al alza.
Fuentes: cnn.com, ft.com, wsj.com.