El escenario de aversión al riesgo comienza a ser predominante en el mercado. El motivo principal es el miedo a nuevos lockdowns y medidas de restricciones de movilidad por el empeoramiento de la situación pandémica.
Países de Europa como Austria, ya han impuesto confinamientos a la población y las cifras de contagios van aumentando en el resto hasta cifras preocupantes. La canciller de Alemania, Merkel, ha calificado la situación como de emergencia y el temor a que entremos en un nuevo periodo de cierres de actividades va en aumento.
Igualmente, la tensión geopolítica es otro factor que influye en este sentimiento negativo. China está probando nuevas armas estratégicas y Rusia acumulando tropas en la frontera con Ucrania, según informan los servicios de inteligencia norteamericanos.
A lo anterior, hay que añadirle las presiones inflacionistas que han llevado a un mayor número de oficiales de la Fed a declarar que quizás será necesario incrementar el ritmo de reducción de las compras de bonos.
En este sentido, la cifra de gastos de consumo personal, la medida de inflación preferida por la Fed, que se publica este miércoles, será muy significativa y en caso de desviarse al alza podría tener un impacto relevante en el mercado. Además, el mismo día, se dará a conocer el contenido de las actas de la última reunión de la Reserva Federal, lo que servirá para evaluar cual es el sesgo de los miembros de la Fed en esta última reunión.
El petróleo se vio afectado por todas estas circunstancias ante las expectativas de que la demanda global pueda sufrir un retroceso con el descenso de la actividad y las restricciones de movilidad.
Asimismo, las noticias de que Estados Unidos, China y Japón están considerando liberar sus reservas estratégicas, para frenar las subidas del precio del crudo, algo confirmado por el primer ministro japonés el pasado viernes, tuvo un efecto inmediato en el precio del petróleo que cayó 4 dólares en el día.
Técnicamente, se ha negociado ya por debajo del primer retroceso de Fibonacci 0.382 en 76.53 y se encamina hacia el nivel de 0.50%, por donde pasa la línea de 100 días SMA, alrededor de 73.79.
El dólar se fortaleció en este escenario de aversión al riesgo, aunque también impulsado por las expectativas inflacionistas.
El par EUR/USD, traspasó el nivel 0.618 retroceso de Fibonacci de la anterior pata alcista situada en 1.1294, confirmando con ello la fortaleza de la tendencia bajista. Técnicamente tendría su siguiente objetivo en la zona de 1.1150, que es la proyección teórica del doble top semanal que se creó entre diciembre 2020 y mayo 2021.
Fuentes: Sources: Bloomberg, Reuters
