La sesión comenzó animada, con subidas impulsadas por las noticias de China sobre el levantamiento de las restricciones. Aunque de momento bastante gradual, la reapertura de China elimina una de las nubes oscuras que rondaban sobre el mercado al dificultar de manera directa las cadenas de suministros con el consiguiente efecto inflacionista, al mismo tiempo que paralizaban la producción manufacturera en Occidente.
Pero el entusiasmo duró poco, durante la sesión se produjo una fenomenal subida de los tipos de interés de mercado (el rendimiento del bono del Tesoro de 10 años aumentó 10 puntos básicos hasta 3,03%) que frenó las subidas iniciales de los índices bursátiles.
En este retroceso también influyó la caída de Twitter por el anuncio de Elon Musk de que se retiraría de su oferta de compra de la compañía si no accedía a la información sobre los bots y cuentas falsas.
La razón de la enorme subida en un día de los rendimientos de los bonos del Tesoro no está totalmente clara. Algunos analistas de mercado lo atribuyen al miedo a la inflación por la persistencia en los precios alcistas del petróleo y gas natural.
La reapertura de China también ha contribuido marginalmente a que las compras de petróleo se intensifiquen. También es cierto que cada vez se extiende más la opinión sobre acciones más agresivas de los bancos centrales, desde el Banco Central de Australia, hasta el de Canadá, sin excluir al Banco Central Europeo que se reúne esta semana y para el que se habla de que la próxima subida de tipos sea de 50 puntos básicos.
Existe una enorme incertidumbre sobre este tema, y no hay una opinión común extendida. Lo que vaya a hacer la Reserva Federal, además de las dos subidas de 50 puntos básicos en sus dos próximas reuniones, va a depender mucho de las cifras que se publiquen de ahora en adelante - el dato del IPC de este viernes será de enorme importancia-.
Las expectativas para esta cifra no son positivas y se espera un repunte mayor en los precios. Quizás, por eso la semana ha comenzado con ventas de bonos del tesoro que han llevado los rendimientos a niveles cercanos a los máximos.
El dólar estadounidense se ha fortalecido en este entorno contra todos sus pares. El movimiento más significativo se ha producido en el par USD/JPY, que ha llegado a superar los máximos de principios de mayo hasta la zona de 132,00. Esto pone el foco de atención del mercado en una potencial reacción de las autoridades monetarias japonesas, que ya mostraron su desacuerdo con un excesivo debilitamiento de la moneda japonesa.
Fuente: Bloomberg.com, reuters.com
