El tono de estas declaraciones sigue siendo bastante claro: las subidas de los tipos de interés continuarán, hay que batir la inflación y el mercado ya anticipa un 80% de probabilidades de que el siguiente paso sea subir 75 puntos básicos. Sin embargo, cualquier matiz que pueda suponer algún cambio respecto a la última y dura intervención de Powell repercute en el mercado.
Y esto es lo que ocurrió con la vicepresidenta de la Fed, Brainard. Aunque se mantuvo firme en cuanto al objetivo de seguir subiendo los tipos de interés y alcanzar el nivel del 2%, concretamente de la inflación subyacente, habló de la mejora en las cadenas de suministro que podría tener un efecto positivo en la inflación. Según ella, se corre el riesgo de exagerar en el contexto actual.
Estas frases fueron suficientes para que el mercado lo considerara algo más "dovish". La reacción fue que los rendimientos de los bonos del tesoro cayeron, y el bono a 10 años bajó nueve puntos básicos, hasta el 3,26%. Al mismo tiempo, los índices norteamericanos se movieron al alza, y el dólar estadounidense se debilitó frente a todos sus pares, excepto el yen.
En este escenario, son importantes las declaraciones que hará hoy el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell. Los inversores estarán atentos a cualquier detalle de su discurso que pueda ir en la misma dirección en la que habló la vicepresidenta Brainard o, al menos, en la que interpretó el mercado.
Más tarde, se publicó el libro beige de la Fed, que confirmó el proceso de desaceleración en el que se encuentra la economía estadounidense, con unas perspectivas de crecimiento futuro generalmente débiles. Esto supuso otro factor que podría actuar en contra de un endurecimiento excesivo de la política monetaria.
El índice Nasdaq recibió un potente impulso en el día, con una subida cercana al 2%.
Pero el acontecimiento más importante de hoy y probablemente de toda la semana es la reunión del BCE. Se da por descontado que el banco central subirá los tipos de interés al menos 50 puntos básicos, aunque 75 puntos básicos también entran dentro de las posibilidades. La cuestión es cómo afectará esta decisión a los índices europeos y al euro.
El DAX alemán se movió en línea con los índices americanos, con una subida de más del 1%, y la moneda europea consiguió repuntar desde el mínimo de 0,9875 alcanzado ayer.
Fuentes: Bloomberg, Reuters
