Según el expediente judicial revelado el lunes, JPMorgan Chase presentó una demanda contra Tesla, impugnando los warrants. El banco de inversión quiere $162,2 millones, más intereses, honorarios y gastos de abogados.
JPMorgan afirma que el fabricante de vehículos eléctricos ha incumplido los términos de un contrato firmado por ambos sobre la modificación del precio de los warrants. La demanda establece que se suponía que Tesla entregaría acciones o efectivo si el precio de sus acciones excedía el "precio de ejercicio" establecido contractualmente en una fecha de vencimiento específica. La denuncia dice: "En total, Tesla no entregó 228,775 acciones de sus acciones ordinarias, dejando a JPMorgan con una posición de cobertura abierta equivalente a ese déficit".
La demanda se produce años después de que JPMorgan ajustara el valor de los warrants cuando Elon Musk tuiteó en agosto de 2018 que estaba considerando la privatización de Tesla. El banco afirma que, según el contrato, tenía derecho a realizar esos ajustes. En respuesta, Tesla declaró que JPMorgan fue "irrazonablemente rápido y representó un intento oportunista de aprovechar los cambios en la volatilidad de las acciones de Tesla". En junio de 2019, tras los siguientes 16 meses, el precio de las acciones de Tesla alcanzó un mínimo de tres años, algo menos de 117 dólares por cada una. En diciembre del mismo año, el precio se disparó más allá de los 420 dólares por acción. Posteriormente, la SEC acusó a Elon Musk de fraude bursátil, y tanto él como Tesla recibieron multas por valor de 20 millones de dólares.
En el momento de la publicación de este artículo, el precio de las acciones de Tesla está cayendo un 1,42%.
Fuentes: cnbc.com, finance.yahoo.com, reuters.com
