Los empleos de nómina no agrícola agregaron 467K frente a las expectativas de alrededor de 150K, después de que el cambio de empleo de ADP cayera a -303.000 un par de días antes. Algunos funcionarios de la Fed habían advertido que el informe de empleo también sería más débil, algo que no sucedió.
Además del número mayor de lo esperado para enero, el mes anterior se revisó al alza en 700K. Aunque la tasa de desempleo subió al 4,0% desde el 3,9%, la buena noticia es que más personas ingresaron al mercado laboral. La tasa de ocupación subió al 62,2% desde el 61,9%, por encima del nivel previo a la pandemia del 62,8%. Y quizás lo más importante para la inflación fue el salario medio por hora, que aumentó un 0,7% al mes y un 5,7 % interanual.
Tras la noticia, los índices bursátiles norteamericanos experimentaron caídas generalizadas, aunque al final de la sesión recuperaron parte del terreno perdido. El temor a una acción más contundente de la Reserva Federal volvió a dominar el mercado, principalmente por el preocupante repunte de los costes salariales.
Por lo tanto, la cifra del IPC que se publica el próximo jueves va a ser crítica para los mercados financieros en los próximos días. Se espera que el dato de inflación interanual correspondiente al mes de enero suba hasta un 7,3%.
Pero el efecto más impactante se experimentó en el mercado de renta fija. El bono americano de 10 años - Tnote - cayó a niveles no vistos desde mediados de 2019 alcanzando un rendimiento de 1,93%. Este movimiento arrastró a los bonos europeos, con la rentabilidad del Bund alemán subiendo hasta un 0,20%, después de que el BCE anunciara por sorpresa que dejaba abiertas sus próximas reuniones y mostrara una mayor preocupación por el comportamiento de la inflación.
Esta noticia afectó más a los índices bursátiles europeos que a los norteamericanos. Los inversores estaban más preocupados por un posible cambio brusco de la política monetaria del Banco Central Europeo que por la propia inflación, que en Europa no subió tanto como en Estados Unidos, con una inflación subyacente sólo ligeramente superior al 2%.
El índice DAX perdió el viernes un 1,5% y vuelve a acercarse al importante nivel de soporte alrededor de 14.900. En caso de que baje, las pérdidas podrían ser mayores.
Fuentes: Bloomberg, Reuters.