A nivel global, los datos económicos que se están publicando también van en el mismo sentido como es el caso del PIB interanual de China del primer trimestre publicado esta madrugada con un incremento de 18.3%.
Datos todos que alientan a los inversores y que son el resultado del enorme progreso en el ritmo de vacunación a nivel mundial y de las enormes medidas de estímulo que han sido implementadas por los gobiernos.
El único factor de incertidumbre sigue siendo el aumento del nivel de contagios, especialmente en Europa, algo que podría ser suponer un freno en el futuro próximo si no se conseguir doblegar la curva de infecciones, pero las esperanzas están puestas en la inmunización que la vacuna va a proporcionar a la población.
El resultado de todo ello en el mercado ha sido la vuelta a un sentimiento de mayor apetito de riesgo que ha debilitado ligeramente al dólar USA, ha impulsado a los mercados bursátiles y de manera muy significativa y de alguna manera contradictoria ha frenado la venta de bonos del tesoro americano.
El repunte en precios de los bonos americanos ha llevado la rentabilidad a niveles mas bajos no vistos desde principio del mes de Marzo. En un escenario de mayores expectativas de crecimiento, como la que está experimentado en estos momentos el mercado, que despertaría las expectativas de un cambio en la política monetaria de la Fed, esto es de subida de tipos de interés y de tapering en el programa de compra de activos, la reacción lógica hubiese sido la venta de bonos, que actúan habitualmente como activo refugio, y con ello el incremento de la rentabilidad de estos. Pero la insistencia de la Reserva Federal sobre su determinación de mantener tipos bajos durante un largo periodo de tiempo hasta tener asegurado de manera plena la recuperación de la economía y el descenso significativo en las expectativas de inflación que se produjo tras la publicación de los últimos datos esta semana, han cambiado el sentimiento de los inversores hacia estos activos y en el día de ayer se produjo un cierre de posiciones largas en bonos que en el caso del 10 años Tnote lo llevó a un descenso de yield hasta la zona de 1.55%. En términos de precio, como apreciamos en el gráfico, y desde una perspéctiva de análisis técnico, está en el proceso de culminar una reversal pattern que se activaría por encima del nivel de 132,65 y que de producirse llevaría al bono a niveles de yield en torno a 1.35% que corresponderían a un precio alrededor de 134,30.
Este descenso en las rentabilidades de los bonos unidos a un dólar más débil en un escenario de crecimiento fuerte de la economía son factores que suponen un soporte al ORO como activo de inversión. El metal ha experimentado una subida importante en el día de ayer y aunque el interés inversor parece haber decaído recientemente, algo que se nota en el descenso de posiciones ETFs, técnicamente apunta a una vuelta a movimientos alcista, sobretodo si se supera la zona por donde pasa la línea de 100 días SMA en torno a 1800 actualmente.
Fuentes: wsj.com, reuters.com.