En el día de ayer, el mercado comenzó con un sentimiento de riesgo positivo, continuando el camino alcista en los índices que se había iniciado el día anterior.
Los resultados empresariales respaldaron este ambiente más optimista. El principal banco estadounidense, Goldman Sachs, publicó ayer sus resultados, que han batido las previsiones de ingresos del tercer trimestre y de beneficio por acción de los analistas del mercado. Johnson & Johnson, otro gran nombre del sector farmacéutico, de suministros médicos y de consumo, también superó los pronósticos.
Hasta el momento, muy buenas noticias, sobre todo si se tiene en cuenta que hace tan solo unas semanas, gran parte del mercado esperaba que la desaceleración de la economía, la inflación y la subida de los tipos de interés tuvieran un impacto negativo en los resultados de las empresas norteamericanas, lo que ya se reflejaría en las publicaciones del tercer trimestre. Todavía se desconocen los resultados de las principales empresas tecnológicas que se darán a conocer en los próximos días.
Sin embargo, el buen desempeño de los índices norteamericanos se vio interrumpido a mitad de la sesión cuando se supo que Apple estaba recortando la producción de su nuevo modelo iPhone 14+, que había sido lanzado sólo unas semanas antes. Esta noticia bastó para que los índices revirtieran sus ganancias y entraran en territorio negativo. Es una clara señal de la actual sensibilidad del mercado a los resultados empresariales y de la enorme incertidumbre a la que se siguen enfrentando los inversores.
Obviamente, el mercado estará pendiente del informe de resultados de Apple, que se publicará en la última semana de este mes.
Tras este episodio, los índices recuperaron parte del terreno perdido tras la publicación de la noticia, y la sesión terminó con ligeras ganancias. El mercado de renta fija se mantuvo relativamente estable, con un rendimiento del bono a 10 años en torno al 4%. Esta baja volatilidad de los tipos de interés ayuda a mantener la calma de los inversores.
Por otro lado, en el mercado de materias primas, el petróleo cayó un 3%. A pesar del recorte de producción de la OPEP+, el anuncio del gobierno estadounidense de que volvería a liberar crudo de su reserva estratégica y las expectativas de una caída de la demanda presionaron a la baja al petróleo. Del mismo modo, otras materias primas como el gas natural, el cobre y el trigo se vendieron en el mercado, lo cual es un factor positivo para los activos de riesgo porque contribuye a aliviar la presión inflacionista.
Fuentes: Bloomberg, Reuters