Esta subida del dólar se produce a pesar del endurecimiento de la política monetaria de la Fed y la subida de los tipos de interés.
El S&P 500 comenzó ayer la sesión con una caída superior al 1%, el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años alcanzó el nivel del 3,25% y el dólar subió por la especulación de que los últimos datos obligarán a la Fed a subir los tipos de forma más agresiva. El mercado ya anticipa un 0,75% en su reunión de este mes.
En general, los activos de riesgo comenzaron la jornada bajo presión después de que China bloqueara Chengdu debido al COVID, lo que podría empeorar aún más las perspectivas de crecimiento económico mundial.
Posteriormente, en Estados Unidos, los datos de solicitudes de subsidio de desempleo, que fueron menores de lo esperado, llevaron al mercado a anticipar fuertes datos de empleo y las nóminas no agrícolas de hoy.
Por otro lado, los datos del PMI manufacturero del ISM sorprendieron con una cifra superior a la esperada.
Todo ello hace pensar a los inversores en una economía que no muestra signos de debilidad y que podría llevar a la Fed a seguir con subidas de tipos elevadas.
Ante esta perspectiva y a la espera de los datos de empleo relevantes que se publicarán hoy, los índices bursátiles estadounidenses continúan bajo una fuerte presión vendedora. Es el caso del tecnológico Nasdaq100, el más sensible al aumento de los costes de financiación.
En el mercado de materias primas, el petróleo cayó bruscamente después de que China decidiera cerrar la ciudad de Chengdu, lo que provocó un aumento de la aversión al riesgo en el mercado.
El petróleo WTI ya está muy cerca del nivel de soporte de los 85,25 $/barril por debajo del cual rompería hasta niveles cercanos a los $77 por barril.
Fuentes: Bloomberg, Reuters