Toda la atención de los inversores se centra en conocer si decidirán anunciar el comienzo de la retirada de estímulos, el tapering. Actualmente la Fed compra alrededor de 120 B de dólares en bonos tanto del tesoro como corporativos, una medida excepcional que fue tomada para contrarrestar los efectos negativos en la economía provocados por la crisis pandémica. Ahora que el ritmo de crecimiento de la economía ha alcanzado un ritmo aceptable y sobre todo que los datos de empleo han mejorado sustancialmente con un último de tasa de desempleo de 5.2%, un bueno número de oficiales de la Fed ya se han manifestado en este sentido, es decir, a favor de ir reduciendo las compras de bonos.
La inflación es otro factor que puede ser tomado en cuenta en esta decisión, aunque las últimas subidas de precios son consideradas como transitorias por la Fed, la preocupación de que estas se mantengan en el tiempo está presente, más aún cuando estas cifras superan en más del doble los niveles de inflación aceptados por la Fed y la mayoría de los bancos centrales.
Por tanto, las opciones a una decisión en este sentido están abiertas. En contra estaría la incertidumbre sobre la situación de China con empresas como Evergrande en bancarrota que si se derrumbara por falta de rescate del Estado podría tener un efecto sistémico en el conjunto de la economía China y por ende de la economía global.
Pero sin menoscabar la importancia de un potencial tapering, en esta reunión se dará a conocer otro dato que podría tener tanta relevancia en el mercado o más que esa decisión. Esta es el dot-plot de los oficiales de la Fed. Los dot-plots son las proyecciones de los miembros de la Fed sobre la evolución de los tipos de interés. Si hubiera algún cambio sustancial con respecto a las últimas proyecciones, en el sentido de que las expectativas de subidas de tipos de interés se adelanten en el tiempo o sean mayores, el mercado también reaccionaría ante un sesgo más "hawkish".
Y esto se reflejaría en un dólar USA mas fuerte, caída en el precio de los bonos del tesoro con la consecuente subida de los yields e incremento en la presión bajista en los índices bursátiles que hemos presenciado en los últimos días.
El oro también se vería afectado por esta decisión. La commodity financiera que se utiliza como hedge ante la pérdida de valor de la moneda, tiene un alto nivel de correlación negativa con los tipos de interés. En el día de ayer, el oro recuperó parte del territorio perdido en días anteriores debido al incremento de la aversión al riesgo que podría causar una falta de acción de la Reserva Federal. Por tanto, si la Fed decidiera inclinarse hacia el lado más hawkish, bien sea por anunciar el comienzo del tapering o porque las proyecciones anticipen en el tiempo las subidas de tipos de interés, el metal precioso podría dejar de tener interés para los inversores.
Técnicamente rompió al alza la resistencia de corto plazo 1767 además de la linea de 100 horas SMA, aunque el indicador RSI horario llegó a niveles de sobrecompra desde donde paró el movimiento alcista con alguna corrección.
Fuentes: Bloomberg.com, Reuters.com