Sin duda, tiene que ver con el convencimiento de que, de una manera u otra, el paquete de estímulo fiscal norteamericano será aprobado. La fecha límite impuesta por Nancy Pelosi, como era de prever, no ha sido respetada y las conversaciones siguen su curso.
Las posturas parecen estar más cerca a medida que los encuentros entre los representantes de ambos partidos tienen lugar. El importe con el que se dote al paquete de estímulos, que es el principal elemento de discordia, se acerca a cada momento. Lo último es que los republicanos proponen 1.8 trillones contra los 2.2 trillones aprobados por los demócratas en el Congreso.
Aunque resulta improbable que se alcance un compromiso a este respecto antes de la fecha electoral, el mercado comienza a dar por hecho que una cifra en torno a 2 trillones de dólares será aprobada en el futuro cercano, más aún si, como las encuestas electorales pronostican, los demócratas consiguen ganar las elecciones.
Con esta certeza, los inversores han comenzado salir de posiciones largas en bonos americanos, movimiento que se refleja en caídas de Tnote10 hasta una importante zona de soporte situada en torno a una franja entre 138.20-138.40, por debajo de la SMA 100 días y que apunta a pérdidas mayores hasta la SMA 200 días que pasa ahora por 137.50.
En términos de yield, el bono ha sobrepasado el nivel de 0.80%, por primera vez desde junio pasado.
Este movimiento de mercado es un fiel reflejo de un mejor apetito de riesgo de los inversores provocado por la cercanía de una inyección monetaria de enorme importe, como la que se implementará en Estados Unidos en el futuro próximo.
De momento, este mejor sentimiento de mercado no se está notando con demasiada fuerza en los mercados bursátiles que, aunque experimentan ganancias, estás son de pequeño calado. Hay que tener en cuenta que nos encontramos en temporada de publicación de resultados y por tanto los inversores esperan a conocer los resultados antes de tomar decisiones. En todo caso, y si no hay mayores sorpresas en cuanto a los resultados empresariales, el anuncio de la implementación del paquete de estímulo fiscal impulsará al alza a los principales índices.
Como señalaba al principio, otro movimiento que refleja esta mejora del sentimiento de riesgo es la caída del dólar USA. La moneda norteamericana que actúa como activo refugio en momentos de incertidumbre está siendo vendida en todos los ámbitos y con especial significación en el caso de USD/JPY. Normalmente existe una correlación directa entre los yields de los treasuries americanos y la cotización de este par. Sin embargo , en esta ocasión aunque los yields han repuntado con fuerza, USD/JPY ha caído hasta los níveles más bajos de los últimos meses, acercándose a la zona de soporte de 104.20.
Esto no es mas que una evidencia de que tanto la política monetaria expansiva de la Fed con los tipos de interés mas bajos de la historia del dólar, unido a una política fiscal agresiva que inyectará en el mercado enormes cantidades de dinero, son ambos elementos que presionan a la baja a la moneda norteamericana y con un alto grado de probabilidad lo seguirá presionando en el futuro.